
17/01/2012.- El angustioso cortometraje La Cabina que protagonizó José Luis López Vázquez en 1972 sería muy distinto hoy en día. Sobre todo porque al personaje le costaría encontrar uno de estos teléfonos públicos.
Tal y como recoge Lainformacion.com, en apenas ocho años hemos hemos pasado de tener casi 100.000 a casi la mitad.
En 2002, según las cifras que aporta la CMT, había 94.836 cabinas (61.296 en la calle, algunas como las de la historia que dirigió Antonio Mercero, y 33.540 en bares, restaurantes y otros establecimientos).
El último dato conocido corresponde a 2010 (el del año pasado se conocerá a mediados de 2012) y durante estos años el parque de teléfonos públicos se ha reducido un 42,7%. Solo quedaban 41.347 cabinas en la calle y 12.950 terminales en bares.
La principal razón de esta reducción es la proliferación de teléfonos móviles. La penetración de esta tecnología ya es del 121,2% (126,6% si tenemos en cuenta las líneas M2M, que son las que se usan en ascensores, alarmas y máquinas de vending).
Con un móvil en el bolsillo (y en muchos casos dos), ¿quién se arriesga a quedarse encerrado dentro de una claustrofóbica cabina telefónica?



