Se trata de un edificio histórico construido en 1920
El Rialto se llamará Teatro MoviStar durante los próximos 2 años
El recinto que acoge el musical ‘Hoy no me puedo levantar’ cambia su nombre por el de su patrocinador, algo bastante común en otros países.
El Rialto se llamará Teatro MoviStar durante los próximos dos años
20/04/2004.- Tras 2 años de obras para dar un lavado de cara al teatro, situado en el número 54 de la Gran Vía madrileña, los productores del musical han decidido aceptar la propuesta de MoviStar, muy habitual en otros países.
En España es la primera vez que un edificio de estas características adopta el nombre de una marca comercial.
Si el resultado es positivo, la operadora española no descarta hacer este tipo de promociones con otro tipo teatros, del mismo modo que ya lo hace con algunos conciertos.
El acuerdo establece que el nuevo Rialto se llamará Teatro MoviStar durante un par de años, que es el tiempo estimado que estará el musical Hoy no me puedo levantar en cartel.
Un edificio histórico
Construido en 1920, fue uno de los edificios más emblemáticos de la Gran Vía, ejerciendo de lugar de estreno para numerosas producciones teatrales y cinematográficas de la época. El cine Rialto siguió funcionando como tal hasta hace 2 años, cuando cerró sus puertas para regresar a sus raíces: el teatro.
El musical de Nacho Cano será el encargado de traer un nuevo escenario a la esta céntrica calle. Un teatro de 1.200 butacas dotado de las más sorprendentes infraestructuras y las más modernas mejoras. Desde los más increíbles y avanzados audiovisuales a la decoración más vanguardista, que contará también con acceso para minusválidos.
Algo habitual en otras ciudades del mundo
Un teatro que adopta el nombre de una marca comercial es algo desconocido hasta ahora en España, pero no del mundo. El más famoso es el hollywoodiense Teatro Kodak, donde se realiza todos los años la ceremonia de entrega de los Oscar.
Donde más extendida está esta práctica es en el ámbito deportivo. La empresa Philips, por ejemplo, da nombre al estadio del equipo holandés de fútbol PSV Eindhoven. Por su parte, el Espanyol de Barcelona está estudiando ofertas de varias multinacionales para rabautizar a su nuevo estadio.
