Mayor consumo. La factura media de un cliente de Vodafone es de 35,3 euros mensuales mientras que la de movistar, su principal rival, se queda en 32,9 euros. Los abonados a Orange facturan sólo 25,08 euros al mes.
Mejores teléfonos. Los clientes con mejor equipación son los de la operadora roja. 2,28 millones de clientes cuentan con un teléfono de última generación (3G), el doble que los de movistar (1,1 millones) y casi seis veces más que los de Orange (0,42 millones).
Más tráfico. El promedio de tiempo de las llamadas es de 178 minutos mensuales en el caso de los abonados de Vodafone. Los de movistar no hablan más de 157 minutos al mes (como media).
Más ingresos. Las tres operadoras crecieron con respecto al año anterior, pero mientras Orange y movistar se quedaron con un 4,1% más cada una, Vodafone incrementó sus ingresos un envidiable 15,3%.
Vodafone, que ya tiene más clientes de contrato que de prepago (54,1% y 45,9%, respectivamente), fue el operador más beneficiado con los procesos de portabilidad. La operadora roja consiguió más clientes de los que se le fueron, lo que le supuso ganar casi 350.000 abonados. Movistar se quedó con 161.000 nuevos clientes. El gran perdedor en este terreno fue Orange, que perdió más de 507.000 usuarios.
