15/07/2015.- El buen tiempo y las vacaciones cambian nuestros hábitos. Sin embargo, puede que viajar, la playa o la piscina no le sienten tan bien a nuestro smartphone o tablet. Prueba de ello son los datos recogidos por PhoneHouse, que destaca que el 40% de las reparaciones de móviles se realizan en verano.
Por ello, para conseguir que nuestro terminal llegue sano y salvo a septiembre, conviene tener en cuenta una serie de consejos:
- Mejor a la sombra. La mayor parte de las averías registradas en los servicios técnicos durante el verano tienen que ver con las altas temperaturas. Para evitar averías internas o fallos en la pantalla fruto del sobrecalentamiento del smartphone, es fundamental no dejar el móvil al sol (incluso en una mochila).
- Asimismo, el uso intensivo de los smartphones, más probable durante las vacaciones, también implica un riesgo de sobrecalentamiento del mismo. Hay aplicaciones, como CPU Gauge o Temperature Gauge, que nos avisan si hemos sobrepasado la temperatura ideal (entre los 30 y 35 grados).
- Ponle una funda. En verano llevamos poca ropa, pero es cuando más conviene abrigar nuestro smartphone. Y no sólo por los posibles golpes y caídas, que de hecho son responsables del 81% de los daños en móviles. También protegen de las salpicaduras de agua, la humedad del ambiente y las manos mojadas cuando salimos de la playa o la piscina. Muchas de las averías están relacionadas con líquidos, y pocos son tan corrosivos como el agua salada.
- Lleva baterías externas. La autonomía de las baterías suele ser el talón de Aquiles de los smartphones. Llevar una segunda batería cargada, una carcasa cargadora o una batería externa puede resultar muy práctico cuando estás casi todo el día alejado de un enchufe.
- Por otra parte, hay que señalar que los largos periodos de carga pueden afectar a nuestro dispositivo: cortocircuitos, sobrecalentamiento… Las baterías de Li-Ion que integran la mayor parte de los dispositivos cortan la energía una vez está cargado el terminal, pero lo ideal es desconectarlo en cuanto termina el proceso.
- Procura usar WiFi. Si la capacidad de tu tarifa de datos es limitada y escasa procura utilizar siempre que puedas una red WiFi y reserva el servicio 3G para cuando no tengas más remedio. Si viajas al extranjero, ten en cuenta los altísimos precios de Internet móvil en roaming. Es posible que te compense comprar una tarjeta prepago local si tu smartphone es libre o está liberado.
- Móvil prevenido vale por dos. El coste medio de las reparaciones de un smartphone se sitúa en unos 140 euros y la cifra es todavía mayor para los de gama alta. Contratar un seguro para móviles es una alternativa si quieres evitar disgustos en caso de siniestro.
- Descarga y activa aplicaciones de seguridad. Llevar activado el PIN de la tarjeta SIM y tener que marcar una secuencia para desbloquear la pantalla son las opciones básicas para evitar que accedan a tu información personal en caso de pérdida o robo. Además, conviene descargar (y también activar) aplicaciones tipo Find My iPhone con las que localizar el teléfono, poder borrar la información de forma remota y recuperar los contactos, fotos y demás datos.
- Prevé los hurtos. La mayoría de los españoles (55%) considera que en las zonas de veraneo y la playa existen mayores hurtos e inseguridad, según la firma de seguridad Tyco. Pero, ¿qué hacemos con nuestras pertenencias cuando estamos en la playa o la piscina? La mayoría (37%) no se despega de ellos o hace turnos con los amigos para no dejarlos sin vigilancia, una medida preventiva fundamental para no llevarnos un disgusto al volver a la toalla.
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