
Una buena postura al usar móviles y tablets evita muchos problemas.
Cuando se habla de los posibles efectos nocivos de los smartphones, lo primero que viene a la cabeza es la palabra radiación. Mucho se ha escrito sobre las ondas electromagnéticas emitidas por estos dispositivos (así como por las antenas de telefonía), pero lo cierto es que, por ahora, muy pocos estudios (y menos aún, de peso), han podido afirmar de forma categórica que puedan generar cáncer u otros problemas de gravedad.
Eso no quiere decir que móviles y tablets no puedan ser perjudiciales para la salud, pero más por un uso incorrecto que por el aparato en cuestión.
Así, los problemas más detectados entre los usuarios de estos dispositivos (especialmente jóvenes) vienen derivado de malas posturas. Según el doctor Ata Pouramini, miembro de la Asociación Española de Quiropráctica, hoy hay «una epidemia de gente con el cuello recto debido a la postura de flexionar en exceso el cuello mientras andan por la calle mirando y trabajando con sus móviles».
Ello puede acarrear diversas dolencias: «Jaquecas, mareos, vértigos, hormigueos y adormecimiento en las manos. Y en un tiempo, si no se trata correctamente, hernias discales y artrosis prematura«, explica este doctor.
La distancia entre la pantalla y los ojos debe ser de unos 45 cm
En cuanto a los tablets, se suelen usar sobre el regazo, lo que crea una postura en la que los hombros, los dorsales, el cuello y la cabeza giran hacia abajo casi 90 grados, provocando, a la larga, un latigazo cervical similar al de los accidentes de tráfico.

Muchas personas colocan el tablet sobre su regazo, una postura que obliga a girar la cabeza casi 90 grados. Lo más recomendable es adoptar otra posición y que la pantalla esté a unos 40 ó 45 centímetros de distancia de los ojos.
Por otra parte, también puede haber problemas asociados con la vista. La explicación es sencilla: la distancia recomendada entre nuestros ojos y una pantalla es de unos 40-45 centímetros, algo que por normal general cumplimos al trabajar con un ordenador.
Sin embargo, con los móviles y tablets, esta medida se reduce casi a la mitad, lo que causa «un estrés enorme sobre los ojos porque han de enfocar» constantemente. Más si tenemos en cuenta que tendemos a consultar nuestros dispositivos móviles muchas veces a lo largo del día.
Por ello, los jóvenes de hoy pueden tener problemas serios en el futuro: «Miopía, ojos cansados, ojos secos y sensación de mareo y pesadez en la cabeza».
Trastornos mentales
Hablando de problemas serios, cada vez es más común la nomofobia entre los usuarios. O lo que es lo mismo, la adicción al teléfono móvil, y que según el Centro de Estudios Especializados en Trastornos de Ansiedad (CEETA) afecta al 53% de la población española.
Desde la CEETA avisan: «Hay que alarmarse cuando nos damos cuenta que si no tenemos acceso al móvil –ya sea porque lo olvidamos en casa, porque se agotó la batería, nos quedamos sin saldo o simplemente no tenemos buena cobertura- comenzamos a tener dificultades en nuestra vida».
Quiero comprarme una tablet y no se que es peor para la salud si utilizarla por wifi o mediante 4g.
Gracias y un cordial saludo