07/11/2012.- Desde hace unos meses, a finales de agosto de este año, Iñaki Urdangarín abandonó sus funciones ejecutivas en Telefónica Internacional tras haber solicitado una excedencia.
En aquel momento el yerno del Rey anunció que tomaba la decisión «ante la posibilidad de que el procedimiento judicial abierto en el que está en curso pudiera tener alguna incidencia negativa para el grupo». Sin embargo, lo hacía «con la intención de volver a desarrollar con la compañía nuevas actividades en el futuro».
Parece que no podrá llevarlas a cabo, ya que el marido de la infanta Cristina ha presentado su dimisión como consejero de Telefónica Internacional y hace unos días renunció a un cargo similar en Telefónica Brasil (Vivo).
Iñaki Urdangarín cobraba un salario anual que rondaba los 1,2 millones de euros y un bonus de 300.000 euros.
Además, Telefónica también se hacía cargo de los gastos derivados de la escolta del ex jugador de balonmano, el alquiler de la vivienda en Washington y los billetes de avión, entre otros conceptos, lo que le suponía a la compañía un gasto adicional de otros 1,2 millones de euros.
Por otra parte, la indemnización en caso de ser despedido por Movistar estaba fijada en 4,5 millones de euros, que con su dimisión no tendrá que pagar.