04/12/2013.- La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lo tiene claro: Vodafone debe pagar una multa de 600.000 euros por bloquear «reiteradamente» las solicitudes de portabilidad de sus clientes (cursadas a favor de Movistar) sin su permiso.
Según recoge Europa Press, la CNMC ha desestimado «íntegramente» el recurso presentado por la filial española de la operadora inglesa: «No es admisible que Vodafone pretenda ignorar el tipo de conducta infractora que ha estado desarrollando durante más de 3 años, sin ninguna voluntad de cesar en ella».
Desde Vodafone reconocen la existencia de «irregularidades puntuales», pero ven desmedida la calificación de la infracción como «muy grave»; del mismo modo que consideran desproporcionada la sanción impuesta.
Sin embargo, el organismo regulador recuerda que dicha sanción es «sensiblemente» inferior al límite máximo legalmente permitido por este tipo de infracción, que se sitúa en los 2 millones de euros.
En todo caso, esta historia todavía puede dar para largo, ya que la CNMC recuerda que Vodafone todavía puede interponer un recurso contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional en el plazo de 2 meses para rechazar esta resolución.
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