Un grupo de investigadores del Colegio de Médicos Tokushima, en Japón, han realizado un ensayo clínico con conejos para comprobar la influencia que las ondas electromagnéticas pueden tener en este aspecto.
Según los resultados publicados en la International Journal of Impotence Research, de los que se hace eco Europa Press, la frecuencia y la duración de la actividad sexual disminuía en los sujetos macho que habían sido expuestos a las ondas del móvil.
Los doctores japoneses también comprobaron qué incidencia tenían las radiaciones que emiten los teléfonos en modo de espera en otro grupo de conejos.
Los resultados mostraron diferencias significativas comparándolos con los del grupo de control, que estuvo alejado de los móviles en todo momento.
No obstante, las conclusiones de este estudio no son extrapolables a los seres humanos por lo que se desconoce qué repercusión podría llegar a tener el uso del móvil en nuestro comportamiento sexual.