Los principales fabricantes de móviles (Nokia, Sony Ericsson, Motorola, LG y Samsung) no están dispuestos a abonar este gravamen que percibirán las entidades de gestión de derechos como Sgae, Egeda, Dama, Agedi y Aisge. Por ese motivo plantearán un recurso.
Si no consiguen invalidar su aplicación, estas empresas se convertirán en los principales contribuyentes gracias al elevado volumen de terminales que cada año se venden en España (unos 20 millones anuales). La cuantía que tendrían que abonar sería de unos 1,5 euros por unidad, por lo que en total podrían tener que desembolsar hasta 30 millones de euros por ejercicio.