
12/02/2013.- La conocida canción que compuso David Arugete en 1952, María Cristina me quiere gobernar, se puede aplicar a la situación que vive en la actualidad Telefónica en Argentina.
La razón es que Cristina Fernández de Kirchner, presidenta de este país, pretende obligar a Movistar a invertir únicamente en la mejora de sus redes móviles en Argentina.
El ejecutivo ha instado a la operadora española, según recoge El Economista, a «abstenerse de realizar cualquier inversión ajena a la prestación de su servicio específico» a través de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC).
De esta manera, Movistar no podrá actuar libremente, sino que deberá seguir las pautas que le marca Kirchner.
La CNC señala que todavía existen localidades en Argentina que carecen de servicio telefónico.
Uno de los principales mercados para Telefónica
Movistar cuenta con una cartera de casi 24 millones de clientes en este mercado y 17,3 millones de usuarios de sus servicios móviles. Argentina es uno de los principales mercados de Telefónica, donde ingresó 2.732 millones de euros en el último ejercicio.
La tensa relación de Movistar en este país se suma a la de otras multinacionales españolas que están padeciendo todo tipo de dificultades en este país para continuar desarrollando sus negocios.
El caso más conocido es el de la expropiación de YPF a Repsol, aunque no es el único ejemplo. Gas Natural, Endesa, Abertis, ACS y OHL también denuncian los problemas que le está generando Cristina Fernández de Kirchner para continuar con sus actividades en Argentina.

