02/11/2007.- La dos terceras partes de los usuarios de telefonía móvil en España gasta más de lo que debería por desconocer cuál es la tarifa más adecuada a sus necesidades de comunicación.
Al menos eso es lo que asegura un reciente informe de la compañía doctorSIM, especializada en ahorro de móvil. Para ello ha analizado el consumo de los usuarios en relación con los planes de precios contratados con las diferentes compañías operadoras del mercado.
Según los datos obtenidos, en nuestro país se paga un 32% de más en la factura mensual debido a la mala elección de las tarifas y sólo el 37% de los usuarios disfruta del plan de precios idóneo. Es decir, que, según estos datos, más de 30 millones de clientes están dejando de ahorrar en su factura mensual.
Podrían ahorrar casi 200 euros al año
En caso de contar con la tarifa adecuada, sería posible ahorrar una media de 190 euros al año, cantidad que se elevaría hasta los 285 euros para perfiles profesionales.
El volumen de gasto y el margen estimado de ahorro no son los mismos entre los clientes de las distintas compañías. De hecho, entre las tres operadoras dominantes en España existen desequilibrios no sólo en cuanto a cuota de mercado, sino también en la forma en que se distribuye el margen de ahorro.
Movistar destaca como la operadora con la que es posible ahorrar más si se escogiera el plan de precios y de ahorro de una forma adecuada y se vigilara mes a mes el gasto de móvil. Los clientes de Telefónica Móviles podrían ver reducidas sus facturas hasta en un 35%.
El segundo puesto lo ocupa Orange, con un margen de ahorro del 32% como promedio mensual.
Vodafone tampoco da excesivos motivos de satisfacción a sus usuarios, que podrían reducir su consumo al mes en un 28%.
Algunas promociones resultan contraproducentes
El análisis demuestra que buena parte del exceso de gasto se encuentra en:
- Elección de planes básicos y de ahorro inadecuados. Las características de los planes que el cliente contrato al darse de alta inicialmente muchas veces ya no encajan con los hábitos de su consumo actual.
- No alcanzar el consumo mínimo. Todas las operadoras cobran un consumo mínimo que el cliente no siempre alcanza. De esta forma se termina pagando a la operadora por un volumen de servicio que no se consume.
- Promociones. También constituyen un factor notable en la facturación inadecuada los bonos y las promociones que no se disfrutan plenamente e incluso que no se llegan a utilizar. Lo mismo sucede con las ofertas de temporada (sobre todo en verano y Navidad): cuando terminan muchos usuarios que las disfrutaban no se percatan de que las tarifas cambian de manera radical por otras nuevas que suelen ser mucho más elevadas.
- Modificación de tarifas. Los operadores efectúan continuos e imprevistos cambios en sus planes de precios y tarifas que rara vez llegan a oídos de los usuarios. La consecuencia más directa de esta situación es que lo que ayer era válido para el bolsillo del consumidor, deja de serlo hoy. »El trabajo de comparar unos y otros planes supone una dificultad enorme para el consumidor, que termina por realizar un consumo excesivo del que no es plenamente consciente. No puede renunciar a los servicios que utiliza, pero sí puede mejorar lo que paga por ellos», explica Hugo Meana, director general de doctorSIM.