Dicha cantidad incluye los 3.400 millones de deuda acumulada por el cableoperador
Vodafone compra Ono por 7.200 millones de euros
La materialización del acuerdo depende de la autorización de los reguladores.
La adquisición de Ono por parte de Vodafone parece haberse cerrado finalmente.
Lo que parecía ir camino de convertirse en una historia interminable por fin ha llegado a su conclusión: Vodafone ha cerrado la compra de Ono tras un acuerdo verbal con los fondos de capital riesgo que controlan el accionariado del cableoperador español.
Aunque todavía queden algunos flecos por atar, ya es oficial: la compañía británica ha conseguido hacerse con el 100% del capital de Ono en una operación que asciende a 7.200 millones de euros. Una cantidad que incluye los alrededor de 3.400 millones de deuda que la firma presidida por José María Castellano acumulaba hasta la fecha.
Como recoge Expansión, se están redactando los contratos de compra-venta, que previsiblemente se firmarán en los próximos días. Con todo, la materialización del acuerdo está condicionada a la autorización de los reguladores pertinentes, lo que podría llevar unos meses más.
Precisamente, la cuestión de las autoridades competentes es una de las dudas del proceso; ya que se desconoce si será la Comisión Nacional de los Mercados y de la Compentencia (CNMC) o el área de Competencia de la Comisión Europea. No es que se esperen dificultades a este respecto que puedan retrasar en exceso la conclusión del acuerdo, pero dada la magnitud de Vodafone, podría tratarse de una operación de ámbito comunitario.
La onda expansiva de la compra de Ono
El golpe sobre la mesa de Vodafone no es uno cualquiera. De confirmarse esta información y cerrarse el acuerdo, la operadora británica reforzaría bastante su posición en el mercado español y cambiaría totalmente el panorama del sector de las telecomunicaciones nacionales.
Al cerrar esta operación, Vodafone tendrá acceso a los 1,9 millones de clientes de Ono, así como a su red fija, que ya llega a los 7,2 millones de hogares. Una infraestructura que completaría su santísima trinidad de las redes junto con la suya propia de ADSL y la de fibra óptica que está desplegando en colaboración con Orange.
Precisamente, la operadora francesa, tras este movimiento por parte de su competidora, podría agilizar sus tan rumoreadas negociaciones con Jazztel para su compra. Esta sería una de las tantas consecuencias que la adquisición de Ono podría traer consigo.
2014 se presenta como un año muy movido.
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