"El enemigo de mi enemigo es mi amigo"
Los operadores se alían con Google para derrocar a WhatsApp
Las aplicaciones de Mark Zuckerberg comienzan a ser una seria molestia para todas las partes.
Los operadores también quieren su parte del pastel. Y qué mejor aliado que Google para lograrlo.
23/02/2016.- El camino hacia la fama está plagado de obstáculos y de enemigos que no ven con buenos ojos la popularidad ajena. Sobre todo si menoscaba su negocio. Y eso es precisamente lo que le ocurre a los operadores con WhatsApp y el resto de plataformas de comunicación OTT.
Sin embargo, hasta ahora las compañías telefónicas se habían visto ‘solas’ en sus quejas contra las aplicaciones de mensajería instantánea, las grandes responsables de la práctica muerte de los SMS, del descenso en el tráfico de llamadas de voz y, por consiguiente, de la caída en los ingresos. Demasiados agravantes como para pasar esta afrenta por alto.
Por suerte para los operadores, un nuevo aliado se suma a su causa en la lucha contra WhatsApp. Y no es un cualquiera. Google ha decidido apoyar a las empresas que integran la GSMA (la asociación internacional que incluye a los operadores más importantes del mundo) para resucitar una tecnología abandonada tiempo atrás.
Hablamos de la Rich Communications Suite (RCS, o Paquete de Comunicaciones Enriquecidas), un conjunto de aplicaciones que permitía a los usuarios disfrutar de algunos de los servicios que han alzado a la cima a WhatsApp y compañía: chats en tiempo real, envío de mensajes multimedia, videoconferencias, etc.
El proyecto ya vio la luz por primera vez allá por 2008, y en los siguientes años se habló de la apuesta de operadores como Movistar, Vodafone u Orange para apoyar esta tecnología, lanzada bajo la marca Joyn y que vendría de serie en los terminales comercializados por las compañías telefónicas.
Sin embargo, las dificultades técnicas para que fuera interoperable (que pudieran usarlo todos los usuarios independientemente del operador y del país en que se encontraran), así como la falta de compromiso de los operadores, hicieron que el proyecto se quedara en el camino. Un camino en el que WhatsApp y otras herramientas ya iban a la cabeza, y con muchos kilómetros (y usuarios activos) a sus espaldas.
Joyn fue un proyecto planteado en 2008 pero que nunca llegó a nada. Ahora tiene una nueva oportunidad.
Facebook: Un enemigo común
¿Por qué iba Google a apoyar a las compañías que, hasta hace poco, no hacían más que lanzarle dardos y acusaciones sobre su posición ventajista, en la que solo se aprovechaba de las inversiones ajenas sin aportar nada a cambio?
Hay un gran responsable en esta inclinación de la balanza en pos de una alianza Google-operadores: Mark Zuckerberg. O lo que es lo mismo: Facebook, WhatsApp y Facebook Messenger.
Google es consciente de que en la red social azul y en todas las aplicaciones de mensajería bajo su paraguas tiene un rival a batir en el terreno móvil.
Un ecosistema que Zuckerberg tiene intención de exprimir al máximo con el inicio de los planes de monetización de Messenger y WhatsApp, que en conjunto suman más de 1.800 millones de usuarios activos.
Una amenaza que hay que frenar con la resurrección de Joyn. Y esta vuelta a la vida se producirá con un aliado de proporciones mastodónticas, Android. Basta imaginar las aplicaciones RCS instaladas de serie en buena parte de los smartphones del androide verde para hacerse a la idea de que estamos ante un arma arrojadiza ideal.
A ella se aferran, de momento, Vodafone y Orange. Telefónica se resiste, pero no todos los días se presenta la oportunidad de frenar el avance de un ‘enemigo’ común tan poderoso. Cuestión de tiempo.
Fuente: Expansión
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