La resolución final podría demorarse hasta un año
Movistar, bajo la lupa de Competencia por discriminar en la resolución de averías
El organismo regulador abre un procedimiento sancionador al OMR por, presuntamente, priorizar su resolución de incidencias sobre las de los competidores a los que les alquila sus redes.

La CNMC vuelve a poner el foco sobre Movistar al detectar que podría estar discriminando entre sus clientes directos y los indirectos a la hora de resolver las averías en sus servicios mayoristas.
No hay año en el que Movistar se escape al lazo de Competencia. Como el ojo que todo lo ve, el organismo que regula este y otros muchos sectores se mantiene vigilante para que los operadores cumplan las normas. Especialmente Telefónica para que, como operador dominante, no incurra en prácticas prohibidas. Y si sucede, sea sancionado.
Y eso es lo que pasa con el último caso con el que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) tiene que volver a llamar la atención al principal OMR del mercado. En concreto, el regulador ha iniciado un expediente sancionador contra Movistar por discriminar, presuntamente, en los tiempos de resolución de averías de algunos servicios mayoristas.
Es decir, según apunta Competencia, entre diferentes periodos de tiempo durante los meses analizados -de enero de 2017 a marzo de 2018-, Movistar ha discriminado a los operadores a los que presta cobertura de cobre y fibra óptica, empeorando los tiempos de provisión y también de resolución de averías.
Movistar discrimina en las averías sus servicios mayoristas a terceros
Movistar se enfrenta a una infracción muy grave de la Ley General de Telecomunicaciones
«A partir de los datos analizados por la CNMC, se han hallado indicios suficientes de que Telefónica habría incumplido la obligación de no discriminación que tiene impuesta dada su posición como operador con poder significativo de mercado en los mercados mayoristas de banda ancha», señala Competencia.
Y eso infringe la actual normativa que obliga a Telefónica a prestar en sus servicios a terceros, según prosigue la CNMC: «los recursos equivalentes a los que se proporciona a sí misma […] en las mismas condiciones y plazos».

Competencia tiene que vigilar con lupa el comportamiento de todos los operadores de telefonía, especialmente el del incumbente: Movistar.
Sin embargo, según explica el regulador, éste no parece haber sido el modelo seguido por Movistar, que «habría suministrado servicios y reparado averías de sus propios clientes en mejores plazos que los registrados para la provisión y mantenimiento de los servicios mayoristas prestados a los operadores alternativos«.
Por todo esto, Movistar se enfrenta a lo que se considera una infracción muy grave de la Ley General de Telecomunicaciones, aunque según detalla la CNMC, la apertura de este expediente no prejuzga el resultado final de la investigación, ya que ahora se abre un periodo máximo de un año para la instrucción del expediente y su resolución por parte de Competencia.
Competencia y Movistar, como el perro y el gato
Cada cierto tiempo, vuelve a ser objeto de debate si en el mercado de las telecomunicaciones existen clientes de primera y de segunda clase. Una idea que, sin duda cobra fuerza con la aparición de casos como este. Sin embargo, además de esto, la cuestión vuelve a poner de manifiesto la dura relación entre el principal OMR del mercado y Competencia.
La incoación de este expediente se une a la retahíla de investigaciones abiertas por la CNMC contra Movistar en los últimos años. Casos que en muchas ocasiones han terminado con Telefónica teniendo que tirar de chequera por haber infringido la normativa pertinente.

Telefónica no solo se pelea con Competencia. En el ring también hay dos grandes contendientes: con el calzón rojo, Vodafone; y con el azul, Movistar. ¿Cuál encajará mejor los golpes?
No es de extrañar entonces que en el verano de 2017 Movistar acusase a Competencia de tenerlo maniatado a través del su expresidente en España, Luis Miguel Gilpérez, quien manifestó no tener versatilidad suficiente para poner los precios que el operador cree pertinente.
En este sentido las disputas siguen a la orden del día y, la última tiene que ver con O2, la nueva marca de Movistar. Desde que se anunció su lanzamiento en España, la compañía ha comunicado en varias ocasiones que Competencia revise el listado de municipios para ampliar el número de localidades marcados como zonas competitivas.
Sus principales competidores están de uñas contra este nuevo contendiente hasta el punto de que Vodafone ha denunciado ante Competencia que Telefónica se está saltando las reglas prometiendo una compensación económica a los usuarios de las zonas reguladas como no competitivas.
O2 reembolsará hasta 220 euros a los clientes con convergentes en zonas reguladas
Y no es el único frente que el OMR rojo ha interpuesto contra el azul: también se ha quejado por sus ofertas de fútbol, aunque, de momento, Competencia no le ha concedido las medidas cautelares que solicitó.