Entre octubre de 2006 y septiembre de 2008
Las operadoras móviles deberían rebajar sus tarifas
El órgano regulador les ha impuesto una reducción de precios por el alquiler de sus redes. ¿Notará el consumidor este efecto?

Las operadoras móviles deberían rebajar sus tarifas
Lo que no está claro es si esta medida, impuesta por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), repercutirá en los bolsillos de los consumidores finales.
Cuando un abonado de una compañía llama por teléfono a otra persona abonada a otra compañía, la primera tiene que pagar a la segunda el alquiler de la red. Éste es uno de los costes más importantes de la llamada, de ahí que las operadoras suelan cobrar menos por las llamadas que se realizan a números de la misma compañía.
Telefónica Móviles, Vodafone España y France Telecom España van a tener que reducir prácticamente a la mitad la tarifa de terminación (47,7% para las llamadas a Movistar, del 48,8% para llamadas a abonados de Vodafone y del 54,3% para llamadas a números de Amena) entre el 1 de octubre de 2006 y septiembre de 2008.
Estas empresas dejarán de ingresar más de 1.500 millones de euros al año, lo que representa el 30% de los ingresos de las operadoras.
Amena, la que más cobra
Otra propuesta del órgano regulador es unificar los precios, hasta ahora muy heterogéneos, de tal forma que, cuando cuando concluya el plazo previsto por la CTM, el precio medio de las terminación de llamada deberá ser de 6 céntimos por minuto para todas las llamadas a móvil.
El objetivo es que el consumidor note esta medida en su factura aunque eso dependerá de la voluntad de las operadoras, que no están muy contentas con la aprobación de esta medida, con la que ingresaron 3.554 millones de euros en 2005.
La medida también ha generado polémica entre las propias compañías, ya que existe una gran diferencia entre las tarifas de terminación de cada una de ellas: Movistar y Vodafone cobraban mucho menos que Amena, por su cuota de mercado.
Los primeros beneficiados por esta normativa van a ser los operadores de telefonía fija, ya que las tarifas de terminación de estas compañías eran hasta seis veces menores que las de telefonía móvil.
Las empresas de móviles podían llevarse hasta un 80% del precio total de una llamada realizadas desde un fijo.