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De la mano de Adamo y por 42,2 euros con fijo o 35 euros solo la conexión

El nombre de Adamo no es muy conocido en el sector de las telecomunicaciones. Siendo una de las últimas incorporaciones en el mercado de los OMV, a principios de 2015, la compañía catalana (de origen nórdico) sí lleva tiempo siendo un referente en lo que a servicios convergentes con fibra óptica se refiere; sobre todo a nivel regional.

Una posición que quiere reforzar llevando su red FTTH con velocidades de 700Mbps hasta 1.000Mbps de subida y 200Mbps de bajada a Madrid.

Adamo Fast! Internet estará disponible en algunos barrios madrileños a partir de principios del mes de junio.

En concreto, serán los barrios de Rejas, Simancas y Canillejas los que primero se beneficiarán del despliegue, aunque al poco tiempo les seguirán Sanchinarro y Las Tablas. Los vecinos podrán elegir entre dos opciones:

• Fast! Internet. Ofrece fibra con velocidades de hasta 1.000Mbps de subida y 200Mbps de bajada por 35 euros al mes.
• Fast! Internet + voz. Por 42,2 euros mensuales incluye conexión de fibra óptica con la mismas características que el plan anterior y añade línea fija con 2.000 minutos en llamadas a fijos nacionales.

Asimismo, los usuarios que precisen de una línea móvil pueden añadirla por 5 euros al mes, con 1GB de datos y llamadas a 0 céntimos los primeros cinco minutos (abonando 18,1 céntimos de establecimiento de llamada y teniendo en cuenta que a partir del minuto 6 se tarifica a 3,6 céntimos por minuto).

Adamo Fast! llegará a Madrid tras ciudades como Barcelona, Sevilla, Lleida o Girona. El despliegue de red en la capital comenzó en abril, por lo que es de esperar que la cobertura del servicio se vaya extendiendo poco a poco.

Según Fredrik Gillstrom, presidente del operador, «era obvio que Adamo desplegaría su red de fibra óptica en Madrid; tanto las empresas como los residentes deben poder navegar a 1.000Mbps».

El tope de los 300Mbps

Movistar y Vodafone son las dos compañías de entre las principales que operan en nuestro país que más hincapié han hecho en mejorar (a costa, en según que caso, de encarecer el producto) su oferta combinada, con especial atención a la fibra óptica.

Ambas compañías han situado un nuevo techo que, por ahora, no ha sido replicado por otros operadores (a excepción de Adamo, que lleva tiempo ofreciendo 1.000Mbps): conexiones de hasta 300Mbps de subida.

¿Cómo se explica que gigantes como Movistar y Vodafone se hayan impuesto un límite tan alejado de la oferta de la marca catalana o de otros productos disponibles en el segmento empresarial?

La respuesta a esa pregunta no la conocemos con certeza, aunque es probable que la explicación sea más comercial que técnica. De cara a los clientes, resulta más sencillo sorprender y atraer a nuevos usuarios mejorando el producto progresivamente que optar por una gran subida que, hoy por hoy, es difícil ampliar hasta pasado cierto tiempo.

En un mercado tan dinámico como el de las telecomunicaciones, quedarse estancado no es buena señal, de ahí que en unos meses es no será raro que estas compañías lancen planes a 350 o 400Mbps.

Adamo ha optado por ofrecer un producto a una velocidad sorprendente como una forma de diferenciarse y hacerse notar en un mercado dominado por Movistar y en el que Vodafone y Orange están intentando no quedarse atrás a golpe de fusiones con otras compañías.

Veremos si la estrategia funciona.

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