El día a día pone a prueba a nuestro smartphone
Vídeo: Cómo ahorrar batería en nuestro móvil
Bajar el brillo o cerrar las aplicaciones en segundo plano, las primeras medidas para evitar este problema.
Unos cuantos trucos permiten ahorrar batería en el smartphone para no tener que depender tan a menudo del cable de carga.
Pocos sonidos nos dan tanto miedo como esa notificación que anuncia que la batería del móvil se está agotando. Aunque son numerosos los fabricantes que se esmeran por aumentar la autonomía de nuestros móviles, lo cierto es que nuestro continuo trasiego diario provoca que muchas veces tengan que convivir prácticamente junto al cargado. Y no siempre hay un enchufe cerca.
Por suerte para nosotros, siempre existen algunas recomendaciones para prolongar la autonomía que permiten que la batería dure lo suficiente como para aguantar hasta llegar a casa y cargarlo. Unas soluciones que, además de alargar la vida de nuestro móvil unos minutos u horas más, ayudarán también a evitar visitar el servicio técnico, porque con la batería no se juega.
Lo primero para ahorrar batería: reducir la luminosidad de la pantalla
El primer consejo y más prioritario pasa por apagar las luces, o lo que para nuestro smartphone significa bajar el brillo de la pantalla. Una opción disponible en cada dispositivo con varios grados diferentes de luminosidad.
Aunque para evitar tener que ir a ajustes en el caso de la gran la mayoría de dispositivos Android existe un pequeño atajo en el que pulsando la barra superior y deslizar el dedo hacia la derecha e izquierda se puede regular el brillo.
Un movimiento similar en el caso de los iPhone, con sistema operativo iOS, aunque en este caso se accede al menú deslizando el dedo hacia arriba desde la parte inferior de la pantalla.
Por otra parte, y aunque sean el eje central de los smartphones y puedan hacer nuestra vida más fácil (o, al menos, más entretenida), las aplicaciones también pueden poner en apuros a la batería.
Sobre todo si las dejamos abiertas en un segundo plano. Por ello, es importante cerrarlas acudiendo al administrador de tareas de nuestro móvil.
Poco a poco el frío comienza a hacer acto de presencia y las fuentes de calor vuelven a ser un peligro para nuestro móvil. Si en verano tenemos que estar pendientes de mantener a nuestro móvil alejado de los rayos del sol para que no se sobrecaliente, en invierno alejar nuestro smartphone de estufas y radiadores ayuda a alargar la vida útil de la batería de nuestro dispositivo.
¿Llegará el momento en el que la autonomía de nuestro móvil no sea una preocupación?
A menudo nos podemos encontrar en zonas donde no haya cobertura. Un problema en muchas ocasiones, pero una buena oportunidad para ahorrar un pequeño porcentaje de batería. Para ello, tan solo será necesario poner nuestro móvil en modo avión y nuestra batería no volará sin que podamos impedirlo.
Y ya puestos a desactivar y activar funciones, si poner nuestro móvil en modo avión no es una posibilidad es aconsejable, siempre que sea posible, conectarse a una red WiFi y desactivar tanto el Bluetooth como el GPS.
Además, prescindir de la vibración ya sea en notificaciones o en llamadas y teclado evita echar mano del cargador antes de tiempo.
Por último, ya se sabe que lo barato sale caro y ahorrarnos unos euros a la hora de comprar un cargador cualquiera puede ser un error fatal para nuestro smartphone. Por, ello usar cargadores de calidad (preferiblemente oficiales), lo que evita que la batería se queme y, como consecuencia, tener que pasar por el servicio técnico.
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